Considerar la textura y consistencia de los alimentos
Ingredientes
Elaboración
  • Incorporar a las comidas alimentos con alto contenido en líquido, como purés y cremas de verduras, sopas, púdines, purés de frutas, flanes, batidos de leche, gelatinas o yogures.
  • Comer el arroz y la pasta muy cocidos; los quesos frescos, tiernos o cremosos; las verduras poco fibrosas y muy cocidas; la mayoría de pescado; las tortillas y los revueltos; algunas carnes tiernas, como el muslo de pollo desmenuzado, las hamburguesas, la carne estofada, o incluso los púdines o pasteles de carne; las frutas maduras y blandas, cocidas o en almíbar.
  • Añadir salsas a algunas preparaciones más secas, como bechameles, vinagretas, mayonesa ligera, etc.
  • Evitar comidas espesas, pegajosas, secas y fibrosas, como el pan, algunas carnes a la plancha, el puré de patatas muy espeso, etc.