El consumo moderado de chocolate no tiene ningún efecto perjudicial sobre la salud de las personas en tratamiento de cáncer. Dentro de una alimentación equilibrada, se puede incluir el consumo de chocolate, preferiblemente negro o alto en cacao (mínimo 70%), siempre en cantidades moderadas.
Podemos incluir el consumo de chocolate dentro de una alimentación saludable y equilibrada. La evidencia científica justifica el consumo moderado de chocolate negro (>70% de cacao), dos o tres veces por semana sin exceder los 50 g a la semana.