Diarrea

Se define como un aumento de la frecuencia de deposiciones, acompañado de una disminución de su consistencia. No es un efecto secundario habitual en el cáncer de cabeza y cuello, pero a veces puede aparecer tras la quimioterapia o por la administración de algunos fármacos o antibióticos. Suele ser puntual y dura pocos días. En caso de prolongarse, consultar con el equipo médico de referencia.

¿QUÉ TE RECOMENDAMOS?

Debido a que la diarrea puede causar la deshidratación, se recomienda beber mucho líquido (agua, infusiones, caldos suaves, bebidas isotónicas), en forma de pequeños sorbos durante el día.

Bebida isotónica casera: Mezclar en un litro de agua el zumo de dos limones, una cucharada sopera de miel, una cucharadita de postre de sal marina y una cucharadita de postre de bicarbonato sódico. Cuando estos ingredientes estén disueltos, dejarla en la nevera hasta que esté fresca.

Realizar comidas frecuentes a lo largo del día en pequeños volúmenes.

Se recomienda empezar por una dieta líquida, por ejemplo, de agua con arroz, y cuando sea bien tolerada introducir alimentos de fácil digestión, como el puré de patata y zanahoria, el arroz hervido, el pescado blanco o el pollo hervido y la manzana al horno o rallada.

Pan tostado tipo biscote, palitos, carne, pescado, huevos (tortilla a la francesa, pollo a la plancha, pescado en papillote), pasta, arroz, patata y sémolas de arroz, trigo y tapioca, galletas tipo maría, etc.

El hervido, la plancha, el vapor y el horno son métodos de cocción más fáciles de digerir.

  • No se recomiendan los cereales y derivados integrales, frutas crudas, verduras, legumbres y frutos secos.
  • Escoger fruta sin piel, cocida, al horno, al microondas o en compota; en su jugo, en almíbar o en zumos colados. Fruta en almíbar (manzana, pera y melocotón), membrillo o plátano y pera bien madura.

Algunas recetas sugeridas:

  • Las verduras más bajas en fibra pueden consumirse en pequeñas cantidades (probar tolerancia) siempre sin piel ni semillas y muy cocidas, también en forma de cremas o caldos colados.

No se recomienda el consumo de mantequillas, margarinas, manteca de cerdo, mayonesa, nata, crema de leche y productos de pastelería, entre otros.

En función de la tolerancia, se pueden introducir poco a poco.

Evitar el café, el chocolate, el té fuerte, el alcohol y los condimentos irritantes y picantes como la pimienta.

No se recomienda el consumo de caramelos o golosinas, néctar de fruta, azúcar simple o miel, chocolate, bebidas azucaradas o edulcoradas, xilitol, sorbitol…